martes, 30 de julio de 2013

Los impuestos que vienen

Mar, 30/07/2013 - 2:32am
En este mundo no se puede estar seguro de nada, salvo de la muerte y de los impuestos.
Benjamin Franklin
La más necesaria y nunca grata reforma es la de carácter fiscal, a nadie le gusta que le apliquen un gravamen, sin embargo, cuando existe la necesidad de tales, se deben llevar a cabo. En el presente escrito mostraré las condiciones en las que se encuentra México (en general) y cuáles pueden llegar a ser los motivos por los que se busca implementar éste aumento de impuestos.
Como todo análisis que busque ser lo más serio posible, éste debe partir de un estudio de las múltiples variables que se encuentran inmiscuidas dentro del tema a tratar, es por ello que expondré un conjunto de datos sobre las condiciones en términos impositivos de nuestro país, con los cuales se podrá valorar el sustento de legitimidad en la posible futura existencia de los nuevos impuestos.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), ha publicado abiertamente que pide a México nuevos impuestos, pues según estudios realizados por el organismo de 2010 a 2012, la recaudación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) alcanzó sólo 3.9% del PIB la más baja en la OCDE y la segunda más baja en América Latina donde se tiene como promedio el 6%.
México en 2012 recaudó 19.7% del PIB cifra por debajo del promedio de la OCDE, en nuestro país sólo se recauda 30% del potencial recaudatorio del IVA, lo cual en términos reales es muy poco para poder llegar cubrir con las necesidades operacionales que necesita un país que busca elevar sus niveles de desarrollo, éste tipo de impuestos indirectos son sumamente importante para un país donde se tiene una gran número de trabajadores que no pagan impuestos directos (ISR) entre el 60% y 70% del total empleado.
Por tanto ya se ha valorado que en México se busqué la implementación de impuestos a productos anteriormente no gravados como lo son los Alimentos y Medicinas, supuestamente dicha elevación se realizaría para los habitantes con los deciles mayores hasta un 37%.
Por su lado la implementación de esta política de ingresos sería para ‘costear’ el llamado Sistema Social Universal, que dotaría de 3 seguros a la población, los cuales son: El seguro universal de salud, el desempleo, y el de riesgo de trabajo. La implementación del IVA a alimentos y medicinas, será sumamente combatido por la oposición de izquierda, que buscarán capitalizarse políticamente a partir de la polarización, pues su debate es dogmatico no científico.
Algo de lo que poco se habla es que según lo que se ha mostrado, es la reforma fiscal en primera instancia a los que buscará cobrarles es a los ricos, la cual se espera que con ello eleve en 4% la recaudación (la necesaria para sufragar el Sistema de Seguridad Social).
Esta reforma fiscal le preocupa a los empresarios pues mucho de lo que se ha filtrado es que busca combatir las exenciones y privilegios a los empresarios, las cuales equivalieron 70,000 millones de dólares para 2012. Es por ello que más allá de las manifestaciones o la toma de tribuna que realizará AMLO y la ‘izquierda’, al gobierno de nuestro país le preocupa la fuga de capitales o la disminución de la inversión, por parte de los empresarios como castigo por la limitación de sus privilegios.
Contrario a lo que el grueso de la población piensa, mucho de ellos por el desconocimiento de cómo funciona la economía pública y las grandes magnitudes económicas, piensan que siempre un impuesto es maligno para sus bolsillos, y no la posibilidad de que a mediano plazo pueda ser benéfico, pues estructura lo endeble de nuestro sistema económico nacional, o el posible efecto multiplicador que en un futuro pueda generarse a partir del gasto de gobierno.
Sin duda otro factor que marca es la búsqueda de una menor dependencia impositiva de PEMEX, pues 40 centavos de cada pesos provienen del petróleo, lo que muestra la aún dependencia de la paraestatal, situación que es un arma de doble filo, pues la dependencia tan fuerte de ella nos genera que un cambio en los precios del petróleo altere nuestros ingresos.
Un recordando largo:
El IVA se estableció desde 1978 para sustituir al Impuesto Sobre Ingresos Mercantiles y en 1983 se incrementó su tasa general del 10 al 15%. En 1991 se redujo la tasa general del IVA del 15% al 10 % en un contexto de baja del ahorro interno (como ahora), lo que aunado a la sobrevaluación del peso frente al dólar favoreció la importación y el consumo en detrimento de la producción y la inversión.
La disminución de la tasa, que en su momento se recibió con beneplácito por parte de los consumidores en virtud de haberse considerado como un apoyo a la economía familiar y un estimulo al sector comercial, y a algunas ramas industriales, privó al sector público de ingresos importantes que se sustituyeron por deuda pública en sus diversas modalidades.
Haber reducido la tasa del IVA propició que la recaudación se viera mermada permanentemente a partir de 1991 hasta 1994. Simultáneamente, su disminución, entre otros factores, generó un consumo excesivo en perjuicio del ahorro, generando un desequilibrio general.
Por tanto, a pesar de lo difícil e impopular como son los impuestos, puede suceder que en ciertas ocasiones, puedan llegar a terminar siendo benéficos para apuntalar las aspiraciones de crecimiento económico. Debemos tener en claro que en ciertas ocasiones la disminución de impuestos no es benéfica, al igual que el aumento de estos tampoco puede llegar a ser dañino, que es un juego de intercambio dinámico y acomodaticio a las necesidades imperantes.
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@David_Quitano